RESEÑA
MXBEAT @ Parque Alameda; marzo 12, 2007
¡Ah, lo que puede hacer el dinero!
En una galaxia muy, muy lejana conocida como Santa Fé, una malvada corporación organizó uno de los mejores eventos del año. Y hasta allá asistí, resistiendo un clima londinense a una semana de que inicie la primavera. Febrero loco y marzo otro poco, dicen.
A pesar del clima y la promesa a medias de barra libre, el festival MXBEAT se lleva aplausos por su impecable organización y la visión de traer a bandas TAN CHINGONAS.
No puedo decirles cómo estuvieron La Gusana Ciega ni Chetes porque llegué tarde. Lo que si puedo decirles es que mientras más rápido dejen de escuchar esa basura, mejor para ustedes. Los Superelegantes, por su parte, me perdieron completamente. Me gustan mucho un par de canciones, pero verlos en vivo me hizo aborrecerlos. Desafinados, descuidados y MUY pendejos con sus comentarios. Las peores mañas de las bandas latinoamericanas en menos de media hora de show.
Aquí la tarde se puso interesante, y subió al escenario Architecture in Helsinki. Sin duda alguna, la banda más sorprendente del festival. De alineación eternamente cambiante, los australianos tocaron un set perfecto. Música complejísima, erudita y salvaje al mismo tiempo. Geniales.
Después de ellos tocó el turno a Tapes n' Tapes, banda de Minneapolis que logró el mismo efecto que los Superelegantes. Ni siquiera en eso son originales. Los cintas-cintas parecen sacados del Indie-Rock Idol: acartonados, sin espíritu ni estilo. De plano me malviajaron y no encuentro ninguna razón por la cual volver a escuchar el disco.
Este mal sabor de boca se limpió con la presentación de Spoon. Señorazos trajeados todos de negro, seguramente son lo más fino que ha salido de Texas. Un rock clásico de factura altísima, como en los mejores tiempos de The Who o los Kinks. A eso me recordaron, pero no les hago justicia. Spoon son su propio género y dios los bendiga. Desde hoy haré penitencia y me aprenderé todas sus canciones para poder corearlas la próxima vez que los vea, porque los volveré a ver, oh sí.
© Rodrigo Jardón
Los Babasónicos llegaron con el público ya borracho y sonrisas de oreja a oreja. Un momento perfecto para escuchar himnos en tu idioma. Desde que estos argentinos mamonsetes comenzaron tocando punk me gustaban. Pasaron por su periodo metalero, su periodo surf, su periodo baladista y ahora están en pleno U2-llena-estadios. Han cambiado radicalmente, podrían tocar cualquier cosa y en vivo se dedican básicamente a complacer. Yo quedé complacidísimo, escuchando casi completo el último disco (que me parece brillante), algunas del Infame y una del Jessico. La mejor banda de rock en México tiene puros integrantes argentinos, go figure.
© Rodrigo Jardón
Finalizando el lineup en el escenario principal, aparecieron Peter Bjorn and John. Bueno, en realidad eran Peter Bjorn and Dude, ya que John aparentemente no llegó de Japón. Tal vez venía guardado junto con las guitarras, que tampoco llegaron, o tal vez tuvo una premonición del accidentado set que tendrían sus compañeros y decidió ahorrarse la molestia. Pero nadie notó su ausencia. A pesar de las fallas en el sonido y un imbécil que se subía al escenario a hacerse el cagadito, Peter Bjorn and Someone fueron todo lo que esperaba: dulces, inteligentes, y algo más. De repente me recordaron a Sonic Youth, con sus riffs de horas, su distorsión finísima. Camaelones sorprendentes. Tanto, que pueden aparentar ser una persona completamente distinta (oops, sí era una persona completamente distinta).
© Rodrigo Jardón
Ocho horas pasaron y el cuerpo ya no aguantaba para quedarse a la fase antrera del festival. Seguramente fueron horas de chupe, tabaco y ligue sin control. Todo mundo en ese lugar parecía un predador listo para el ataque pero el predador, en realidad, era el evento mismo. No por nada Marlboro comercializa una de las sustancias más adictivas y peligrosas del planeta: con una capacidad de organización como ésta, atraparían a cualquiera. Cigarros, tragos, playeras y mochilas gratis; una fiesta para miles de personas donde todo funciona, desde el estacionamiento hasta los baños. A eso súmenle bandas que nadie más hubiera traído (qué inothentes, dirían los niños anti-piratas) y el resultado es un día de puro hedonismo. Es lo mínimo que debería devolverte una compañía que se dedica a matarte lentamente. Killing Me Softly debería ser su canción, y yo la cantaría.
En una galaxia muy, muy lejana conocida como Santa Fé, una malvada corporación organizó uno de los mejores eventos del año. Y hasta allá asistí, resistiendo un clima londinense a una semana de que inicie la primavera. Febrero loco y marzo otro poco, dicen.
A pesar del clima y la promesa a medias de barra libre, el festival MXBEAT se lleva aplausos por su impecable organización y la visión de traer a bandas TAN CHINGONAS.
No puedo decirles cómo estuvieron La Gusana Ciega ni Chetes porque llegué tarde. Lo que si puedo decirles es que mientras más rápido dejen de escuchar esa basura, mejor para ustedes. Los Superelegantes, por su parte, me perdieron completamente. Me gustan mucho un par de canciones, pero verlos en vivo me hizo aborrecerlos. Desafinados, descuidados y MUY pendejos con sus comentarios. Las peores mañas de las bandas latinoamericanas en menos de media hora de show.
Aquí la tarde se puso interesante, y subió al escenario Architecture in Helsinki. Sin duda alguna, la banda más sorprendente del festival. De alineación eternamente cambiante, los australianos tocaron un set perfecto. Música complejísima, erudita y salvaje al mismo tiempo. Geniales.
Después de ellos tocó el turno a Tapes n' Tapes, banda de Minneapolis que logró el mismo efecto que los Superelegantes. Ni siquiera en eso son originales. Los cintas-cintas parecen sacados del Indie-Rock Idol: acartonados, sin espíritu ni estilo. De plano me malviajaron y no encuentro ninguna razón por la cual volver a escuchar el disco.
Este mal sabor de boca se limpió con la presentación de Spoon. Señorazos trajeados todos de negro, seguramente son lo más fino que ha salido de Texas. Un rock clásico de factura altísima, como en los mejores tiempos de The Who o los Kinks. A eso me recordaron, pero no les hago justicia. Spoon son su propio género y dios los bendiga. Desde hoy haré penitencia y me aprenderé todas sus canciones para poder corearlas la próxima vez que los vea, porque los volveré a ver, oh sí.
Los Babasónicos llegaron con el público ya borracho y sonrisas de oreja a oreja. Un momento perfecto para escuchar himnos en tu idioma. Desde que estos argentinos mamonsetes comenzaron tocando punk me gustaban. Pasaron por su periodo metalero, su periodo surf, su periodo baladista y ahora están en pleno U2-llena-estadios. Han cambiado radicalmente, podrían tocar cualquier cosa y en vivo se dedican básicamente a complacer. Yo quedé complacidísimo, escuchando casi completo el último disco (que me parece brillante), algunas del Infame y una del Jessico. La mejor banda de rock en México tiene puros integrantes argentinos, go figure.
Finalizando el lineup en el escenario principal, aparecieron Peter Bjorn and John. Bueno, en realidad eran Peter Bjorn and Dude, ya que John aparentemente no llegó de Japón. Tal vez venía guardado junto con las guitarras, que tampoco llegaron, o tal vez tuvo una premonición del accidentado set que tendrían sus compañeros y decidió ahorrarse la molestia. Pero nadie notó su ausencia. A pesar de las fallas en el sonido y un imbécil que se subía al escenario a hacerse el cagadito, Peter Bjorn and Someone fueron todo lo que esperaba: dulces, inteligentes, y algo más. De repente me recordaron a Sonic Youth, con sus riffs de horas, su distorsión finísima. Camaelones sorprendentes. Tanto, que pueden aparentar ser una persona completamente distinta (oops, sí era una persona completamente distinta).
Ocho horas pasaron y el cuerpo ya no aguantaba para quedarse a la fase antrera del festival. Seguramente fueron horas de chupe, tabaco y ligue sin control. Todo mundo en ese lugar parecía un predador listo para el ataque pero el predador, en realidad, era el evento mismo. No por nada Marlboro comercializa una de las sustancias más adictivas y peligrosas del planeta: con una capacidad de organización como ésta, atraparían a cualquiera. Cigarros, tragos, playeras y mochilas gratis; una fiesta para miles de personas donde todo funciona, desde el estacionamiento hasta los baños. A eso súmenle bandas que nadie más hubiera traído (qué inothentes, dirían los niños anti-piratas) y el resultado es un día de puro hedonismo. Es lo mínimo que debería devolverte una compañía que se dedica a matarte lentamente. Killing Me Softly debería ser su canción, y yo la cantaría.
9 Comments:
Ora, Architecture in Helsinki en Mexicalpan... sigh.
(envy) ;)
wtf???
Cuándo anunciaron que estaría Peter Björn and John??????
Estoy completamente decepcionado con esta supuesta reseña. Son comentarios y solamente eso. En ningún momento se muestra profesionalismo al escribir (¿ni siquiera te pudiste asomar a ver a Bonde Do Role o a DIPLO, probablmente el pinchdiscos más acertado del momento?). ¿Cuáles fueron las "mañas" y comentarios de Los Super Elegantes? ¿P, B & J te recordaron a Sonic Youth?
Es lamentable leer este tipo de textos en sitios web como UpToEleven, el cual tenía la gran diferencia de estar organizado y escrito como un sitio de verdadero periodismo rock, no solamente como una serie de comentarios personales que podrías encontrar en infinidad de blogs. Cuando las publicaciones como Rolling Stone México y R&R dejan de ser fuentes confiables del conocimiento de la escena musical, sitios como éste y otros tienen la responsabilidad de sustiuirlos.
Que lástima.
yo me emocione bastante en architecture in helsinki, me encantan. Y los de peter bjorn & john se sacaron de pedo cuando tocaron young folks, prendio muchisimo.
y neta no viste a diplo? ese wey es otro pedo...
Estimado E.
Si le das crédito al fotógrafo que te prestó sus imágenes, también deberías hacerlo de la única persona en todo el festival que se percató de la ausencia de John y que simultáneamente te lo comunicó ayer por messenger.
Estoy harto de tanto hurto y exijo que edites el post.
Aun así te quiero.
jajaja chale, cuánta malavibrez... Todo mundo se dio cuenta de que no era John... jjaja see...
sof
Hey. A mi me gusto la reseña y tus comentarios y el evento. Yo me la pase muy bien en Bonde, Data Y Diplo. Creo que falto más comentarios de esa parte.
Gracias por seguir informando.
Autopromoción desvergonzada (en especial para anónimo o anónimos):
Otra opinión no requerida del MxBeat (esta con opiniones sobre la fiesta) en mi blog
http://pusesquenosetocarnada.blogspot.com
dénse una vueltecita.
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