julio 16, 2007

ESENCIAL
Marquee Moon, Television












Marquee Moon
Television
1977, Elektra
género: rock, punk


Uno no puede ser demasiado cuidadoso al momento de cuadrar los detalles que forman un movimiento tan drástico como el rock o el punk. Cada chispazo de juventud explosiva determina un nuevo sonido, una nueva camada mutante.

Son estas joyas espontáneas los Elvises, Ramones y New Divisions del mundo. Otro momento genial es Marquee Moon, de Television.

En 8 canciones, la banda de Tom Verlaine dejó un testimonio que, para muchos, sigue siendo desconocido y es importantísimo para la corriente de punk melódico que lideran los Strokes. Ellos mismos admiten haber tomado muchas cosas directamente de Television, y ahí son inteligentes por aceptarlo (nadie puso atención de cualquier manera).

Desde la portada podemos ver el atisbo de un Casablancas menos rico, más drogado y mucho más inteligente. Pero este no era sólo un vocalista carismático, Verlaine me suena más a Baudelaire.

Television también sonaba más a poesía que a MTV. Marquee Moon fue su pináculo y final. Como tantas otras bandas, volaron al sol y sus alas se deshicieron. En este disco podemos ver el instante exacto donde el rock progresivo/clásico de las decadas anteriores se fundía por completo con el movimiento hipster neoyorquino de finales de los setenta para encender una vertiente de punk fino y preciso, y consecuentemente la supernova de 'música alternativa' que ha reinado desde entonces.

Las guitarras de Verlaine y Richard Lloyd llevan tanta historia sobre ellas que es difícil separar sus años como los anillos de un árbol. Ahí está Jimmy Page, Robby Krieger, Hendrix, Clapton, B.B. King, derretidos uno sobre otro, creando un paisaje ácido, infinitamente tratado de igualar en las décadas próximas.

Las letras, abstracciones estupendas de la ciudad y el momento correctos. El West Side demasiado intelectual para su bien.

Marquee Moon puede mantenerse en las sombras de un Nevermind the Bollocks o un Closer; pero una mirada minuciosa al rock actual puede mostrar los pequeños guijarros de Television por todas partes, incrustados aquí y allá en las chamarras, los peinados y los dedos ansiosos de una generación completa de Myspaceros.

Ahí, ahí está la vida eterna. No cayendo en el pozo de los discos de 99 pesos.